Soñar no es un delito: mural en la Universidad SurColombiana. Foro: Colectivo Macondo. |
En 2013, durante el Paro Nacional Agropecuario y Popular, las autoridades y organismos encargados de judicializar a las gentes en el Huila presentaron a Oscar Gasca como un trofeo más en la lucha contra la rebelión y el terrorismo. En detrimento de la presunción de inocencia y del debido proceso, lapidaron a Oscar señalándolo como coparticipe en unos delitos poco claros y convincentes. Así, lograron vincularlo con el uso y porte de explosivos, y catalogarlo como rebelde y terrorista, lo cual le ha costado a Oscar dos largos años en prisión mediados por dilaciones y enredos.
Gasca, como comúnmente lo distinguían sus compañeros, es victima de unas acusaciones por asumir el deber ético de defender a los suyos. Mientras los campesinos de su Huila eran violentados e intimidados durante el paro de 2013, él –siendo un estudiante y activista de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU-Colombia)– asumió el acompañamiento y cubrimiento de los hechos más tensos ocurridos durante aquellos días. Y es en desarrollo de esa tarea que termina en la maraña que hoy está.
Sus compañeros, quienes se organizaron en el Colectivo Macondo, no solo lo recordaron como un activista de la FEU-Colombia, sino como un “líder estudiantil en la universidad (…) dispuesto a llevar siempre la vanguardia, a tomar la iniciativa frente a temas de movilización y temas que aquejaban al estudiantado”; además, lo evocaron como un promotor irrestricto de la Marcha Patriótica, quien cursando sexto semestre de Administración de Empresas, le metió todo a un proyecto articulador de las rebeldías tendiente a transformar la realidad que diariamente presenciaba desde la USCO.
A propósito de su detención, hablamos con algunos de los integrantes del Colectivo Macondo en la idea de acercarnos a Oscar Gasca, establecer las razones por las cuales está recluido, saber sobre su situación actual y precisar lo que le corresponde hacer a los estudiantes de la FEU-Colombia frente a su caso.
AEP: ¿Por qué terminan deteniendo a Oscar?
Colectivo Macondo: Al compañero lo detienen en el marco del Paro Agrario de 2013, cuando se dirigía a uno de los sitios de concentración para hacer un acompañamiento en DDHH a los campesinos que allí se encontraban. Debido a la experiencia que él tenía trabajando en DDHH y comunicaciones, fue una de las personas que –desde la Marcha Patriótica y la federación– salió a hacer acompañamiento a los compañeros campesinos que en esos momentos se encontraban en todas las dinámicas del paro agrario.
AEP: Detengámonos un poco en ese episodio ¿De dónde sale Gasca? ¿A dónde le toca dirigirse? ¿Quién lo detiene? ¿Quiénes son los involucrados? ¿Cómo es la reacción cuando lo detienen?
CM: El compañero sale de la oficina de MAPA, se encuentra con el resto de personas y luego se movilizan en un taxi hacia la concentración. Ellos se movilizan allá de último momento –no era algo planeado de antemano– debido a que se presentaron unos disparos por parte de la fuerza pública a los campesinos que estaban concentrados. El compañero y otros tres –con quienes él fue detenido– se dirigían hacia el sitio de concentración justamente para hacer el cubrimiento de DDHH y Comunicación de lo que había sucedido con los disparos realizados contra los campesinos.
Los compañeros –entre quienes estaba Oscar Gasca– son detenidos antes de llegar a la concentración. Allí los hacen bajar del taxi, los requisan y no les encuentran nada. En un momento dado, sacan una maleta de la parte delantera del taxi y lo reportan como si fueran explosivos e inmediatamente les hacen la captura. Lo que da luces del falso positivo judicial es el tema de los explosivos, lo cual sonó desconocido para ellos.
El primer reporte que dan las autoridades que lo capturan es que llevaban una carga explosiva de 2 kilogramos en el taxi. Después cambian la versión afirmando que eran 2 kilogramos, pero que cada una de las personas llevaba un porcentaje del explosivo en cada bolso, cuando el reporte inicial señalaba que era una maleta encontrada en el taxi. Posteriormente, volvieron a cambiar la versión al indicar que eran componentes para armar las papas bomba; para la elaboración de explosivos. En ese marco, se ha venido dando violación al debido proceso, todo el tema jurídico y retraso de las audiencias.
AEP: En el momento en que él es detenido, ¿Cuál es el primer delito o los primeros delitos que le imputan?
CM: Cabe decir que la reacción de los compañeros no fue la más apropiada al momento de ser capturados, ya que seguramente por intimidación y miedo ellos accedieron a firmar un acta en blanco y les imputaron los cargos de rebelión; porte, tráfico y uso de explosivos; concierto para delinquir y terrorismo.
AEP: En el momento actual, ¿Cómo va el proceso de Oscar Gasca?
CM: Por el momento, y a raíz de lo que mencionaba antes, es un proceso que se ha venido adelantando sin las más mínimas garantías. Visto de ese modo, no se ha respetado la cadena de custodia de las pruebas, han cambiado la versión alrededor de las mismas y en un momento dado la fiscalía comenzó a dilatar el caso, el cual lleva ya dos años.
Ya ha habido muchas audiencias aplazadas en un ambiente en el que no se ha respetado el principio de inocencia del compañero, porque de antemano el boom mediático que se le dio en un principio fue que habían capturado milicianos de la Universidad Surcolombiana con explosivos, quienes estaban acompañando a los campesinos.
Todo lo anterior ha provocado que el proceso sea muy viciado, de tal manera que el mismo juez que está llevando a cabo el caso sesgue el proceso de una forma muy tendenciosa. La postura del juez y el fiscal siempre ha sido romper de manera casi que grosera la defensa del compañero, sin respetar el principio de inocencia, es decir lo están juzgando bajo el principio de que él es culpable, lo cual genera un vicio total alrededor del proceso.
AEP: Van más de dos años en los que Oscar está literalmente recluido, es un prisionero político. En el contacto que ha tenido con ustedes, ¿Cómo ven a Oscar? ¿Cuál es el estado anímico de él? Cuales han sido las facetas por las que ha tenido que atravesar? Él ¿Cómo ha asumido el estar en la cárcel?
CM: Han sido varias facetas las cuales son comprensibles. En primera instancia, se creía que el proceso se podía tumbar fácilmente y que el tiempo que los compañeros iban a pasar en prisión no iba a ser mucho por la manera en que los capturaron. Sin embargo, por los mismos vicios el caso se ha prolongado ya más de dos años por lo que han sido ya varias facetas que ha atravesado el compañero.
En un momento apareció el desespero y las ganas de salir, pues él es una persona que siempre se ha autodeterminado y verse en una situación de prisión –recluido por el apoyo que estaba brindando humanitariamente– y bajo las circunstancias en que se encontraba que era de prisionero político, llevó a que el compañero se desesperara, lo cual fue un momento difícil pero que afortunadamente ha venido superando.
Actualmente, el compañero tiene otros horizontes, se le nota con más esperanza y más allá de decir que es cuestión de resignación, el compañero comprende el contexto en el que él estaba y está. Muestra de lo anterior es que ha venido adelantando trabajo al interior de la prisión, reuniones y actividades conjunta con familiares, entonces se puede decir que ya ha superado la etapa de crisis y está más confiado de que pronto va a quedar en libertad.
AEP: Ustedes desde el colectivo Macondo, ¿Qué le dirían a los demás compañeros de la FEU-Colombia que están organizados en grupos u organizaciones y a la federación en general sobre el caso particular de Oscar Gasca?
CM: Desde el colectivo Macondo lo que hacemos es un llamado a la visibilización y al acompañamiento del compañero. El trabajo de empezar a generar dinámicas de DDHH que nos vayan cuidando como organización, es también importante. De igual manera, las campañas de solidaridad y de protesta alrededor de Oscar deben agudizarse mucho más: es hora de que la federación se solidarice al máximo para tener así una presión social del proceso que a él lo respalda.