Con esta frase, el presidente Comité ProDefensa del Agua y el Medio Ambiente de Boquerón (COPAMA) caracterizó la situación que actualmente viven los habitantes del sector, ya que las 1.100 viviendas nuevas edificadas por la constructora COLPATRIA no cuentan con el servicio de agua y la única opción ofrecida por la alcaldía es reducir el suministro a las viviendas aledañas para garantizarle el preciado liquido
La creciente preocupación de las gentes del barrio Boquerón de Ibagué por el futuro del agua que surte a sus viviendas, la cual se tradujo en una masiva reunión el pasado 20 de mayo en las instalaciones de Villa Mery, desató la respuesta del alcalde de la ciudad, Luis H. Rodríguez: a través de una entrevista publicada por El Nuevo Día, el primer mandatario de Ibagué intentó despejar las dudas más importantes sobre cómo se le garantizará el agua a las 1.100 viviendas que constituyen los multifamiliares El Tejar sin perjudicar a las familias que habitan esa área de la ciudad.
Infortunadamente, las claridades que pretendió ofrecer el alcalde perdieron peso ante argumentos poco convincentes. Por ejemplo, Luis H. Rodríguez aseguró que el agua de las 1.100 viviendas será captada de un acueducto comunitario, AcuaBoquerón, y de las quebradas la Cristalina, Rincón y Pontezuela ubicadas en Peñaranda; sin embargo, olvido que tales fuentes abastecen a otras tantas familias ubicadas en sus alrededores y que sus cauces son cambiantes dependiendo la temporada invernal y del verano.
Frente al caso de AcuaBoquerón, desde la Agencia Estudiantil de Prensa (AEP) hablamos con Baudilio Acevedo, un arquitecto retirado, residente en el sector de Boquerón hace 8 años y presidente del COPAMA. Él nos señaló que el agua del acueducto AcuaBoquerón es insuficiente: hace tres años “la poca agua medio alcanzaba para nosotros los habitantes de todo Boquerón incluyendo las urbanizaciones Terrazas de Boquerón y Brisas de Boquerón”. Ahora que son más habitantes –nos dice Baudilio– “se nos está racionando el agua: si es verano que porque hay verano, si es invierno también nos controlan el agua porque baja sólo barro”.
En un documento dirigido al alcalde Luis H. con fecha de radicado de 22 de abril del año en curso ante la alcaldía, el COPAMA y ACUABOQUERÓN expusieron la situación del acueducto y su capacidad. Según el texto, AcuaBoquerón garantizó, a 2010, la demanda de aproximadamente 781 familias concentradas en Boquerón, Brisas de Boquerón y Terrazas de Boquerón, más la población que concurre en la Institución Educativa Técnica Ciudad Ibagué. En este sentido, y sin perder de vista el crecimiento poblacional y los impactos de la presencia humana sobre la cuenca de la quebrada El Tejar, ¿Será posible que el cauce de dicha fuente garantice el agua de las 1.100 viviendas nuevas?
A partir de lo señalado por Baudilio Acevedo y lo precisado por el documento referenciado, los 29 litros por segundo de la quebrada el Tejar concesionados por CORTOLIMA a AcuaBoquerón no abastecerán de agua a los multifamiliares El Tejar, porque ni siquiera garantiza la de los habitantes del sector de Boquerón.
Pese a esto, Luis H. planteó un “plan B” para suministrar de agua a las 1.100, el cual no considera viable el presidente del COPAMA. Aunque el alcalde de Ibagué, reconoció que el agua de los multifamiliares El Tejar no puede depender exclusivamente de AcuaBoquerón sino de tres quebradas más, Baudilio Acevedo cree que las condiciones climáticas, topográficas y geológicas del lugar donde nacen estas tres fuentes dificultará la captación adecuada del líquido: por una parte, “allá también se les agota el agua en verano”; por otra, esas aguas surten otros acueductos comunitarios; y, finalmente, “la topografía es totalmente opuesta (…) por esos lados pasa una o dos fallas geológicas”; incluso, la construcción de los captadores de agua y las redes, porque esa agua esta a unos 25 kilómetros de distancia de Boquerón, tardará un tiempo menor a un año, como nos lo manifestó presidente del COPAMA.
Ante esto, el señor Baudilio considera que la opción más adecuada para garantizar el agua a las 1.100 viviendas nuevas, al sector de Boquerón y a los demás ibaguereños, es el acueducto alterno: “la única solución es terminar el acueducto alterno, que daría agua a este sector e Ibagué”, porque la ciudad tiene recursos hídricos suficientes que no han sido canalizados en función del desarrollo y el bienestar de sus gentes, como nos lo sugirió.
Baudilio Acevedo, presidente del Comité ProDefensa del Agua y el Medio Ambiente (COPAMA) del barrio Boquerón. Foto: AEP. |
La creciente preocupación de las gentes del barrio Boquerón de Ibagué por el futuro del agua que surte a sus viviendas, la cual se tradujo en una masiva reunión el pasado 20 de mayo en las instalaciones de Villa Mery, desató la respuesta del alcalde de la ciudad, Luis H. Rodríguez: a través de una entrevista publicada por El Nuevo Día, el primer mandatario de Ibagué intentó despejar las dudas más importantes sobre cómo se le garantizará el agua a las 1.100 viviendas que constituyen los multifamiliares El Tejar sin perjudicar a las familias que habitan esa área de la ciudad.
Infortunadamente, las claridades que pretendió ofrecer el alcalde perdieron peso ante argumentos poco convincentes. Por ejemplo, Luis H. Rodríguez aseguró que el agua de las 1.100 viviendas será captada de un acueducto comunitario, AcuaBoquerón, y de las quebradas la Cristalina, Rincón y Pontezuela ubicadas en Peñaranda; sin embargo, olvido que tales fuentes abastecen a otras tantas familias ubicadas en sus alrededores y que sus cauces son cambiantes dependiendo la temporada invernal y del verano.
Frente al caso de AcuaBoquerón, desde la Agencia Estudiantil de Prensa (AEP) hablamos con Baudilio Acevedo, un arquitecto retirado, residente en el sector de Boquerón hace 8 años y presidente del COPAMA. Él nos señaló que el agua del acueducto AcuaBoquerón es insuficiente: hace tres años “la poca agua medio alcanzaba para nosotros los habitantes de todo Boquerón incluyendo las urbanizaciones Terrazas de Boquerón y Brisas de Boquerón”. Ahora que son más habitantes –nos dice Baudilio– “se nos está racionando el agua: si es verano que porque hay verano, si es invierno también nos controlan el agua porque baja sólo barro”.
En un documento dirigido al alcalde Luis H. con fecha de radicado de 22 de abril del año en curso ante la alcaldía, el COPAMA y ACUABOQUERÓN expusieron la situación del acueducto y su capacidad. Según el texto, AcuaBoquerón garantizó, a 2010, la demanda de aproximadamente 781 familias concentradas en Boquerón, Brisas de Boquerón y Terrazas de Boquerón, más la población que concurre en la Institución Educativa Técnica Ciudad Ibagué. En este sentido, y sin perder de vista el crecimiento poblacional y los impactos de la presencia humana sobre la cuenca de la quebrada El Tejar, ¿Será posible que el cauce de dicha fuente garantice el agua de las 1.100 viviendas nuevas?
A partir de lo señalado por Baudilio Acevedo y lo precisado por el documento referenciado, los 29 litros por segundo de la quebrada el Tejar concesionados por CORTOLIMA a AcuaBoquerón no abastecerán de agua a los multifamiliares El Tejar, porque ni siquiera garantiza la de los habitantes del sector de Boquerón.
Pese a esto, Luis H. planteó un “plan B” para suministrar de agua a las 1.100, el cual no considera viable el presidente del COPAMA. Aunque el alcalde de Ibagué, reconoció que el agua de los multifamiliares El Tejar no puede depender exclusivamente de AcuaBoquerón sino de tres quebradas más, Baudilio Acevedo cree que las condiciones climáticas, topográficas y geológicas del lugar donde nacen estas tres fuentes dificultará la captación adecuada del líquido: por una parte, “allá también se les agota el agua en verano”; por otra, esas aguas surten otros acueductos comunitarios; y, finalmente, “la topografía es totalmente opuesta (…) por esos lados pasa una o dos fallas geológicas”; incluso, la construcción de los captadores de agua y las redes, porque esa agua esta a unos 25 kilómetros de distancia de Boquerón, tardará un tiempo menor a un año, como nos lo manifestó presidente del COPAMA.
Ante esto, el señor Baudilio considera que la opción más adecuada para garantizar el agua a las 1.100 viviendas nuevas, al sector de Boquerón y a los demás ibaguereños, es el acueducto alterno: “la única solución es terminar el acueducto alterno, que daría agua a este sector e Ibagué”, porque la ciudad tiene recursos hídricos suficientes que no han sido canalizados en función del desarrollo y el bienestar de sus gentes, como nos lo sugirió.